"Paradójicamente, el reino de la estética es, antes que nada, el reino de la anestesia general. Ya no se ve, sólo se reconoce. La época imperial consiste pues en una metódica conjuración de lo mesiánico. Es el tiempo de la cita, de la referencia, de la prudencia existencial. Todas las formas-de-vida se mantienen a raya: son posibilidades, arte, historia, pasado. Ciertas subjetividades se maquillan como tal o cual figura trasnochada."
"Y asumimos el escándalo que pueda acarrear admitir la amenaza, en nosotros, fuera de nosotros, en todas partes, de la crisis de la presencia. Decimos incluso que si hay una igualdad efectiva entre los humanos esta se da justamente ante esa amenaza"
"El pacifismo retorna a lo que no debería haber dejado de ser jamás: una benigna patología existencial."
Llamamientos, Comité Invisible
I.
Utilizo el poema
como un mensaje o un terreno
abisal.
No lo pienso negar
toda literatura es un diario intimo
aunque también
toda subjetividad ocupa
más de un lugar, múltiple,
se cansa de encontrar
diversifica los emisarios.
II.
Todo lo que quiero decirle al mundo
también es todo lo que quiero que sepa
una parte de ese mundo.
No existe forma alguna de pensar el todo
pero si hay una paciencia del deseo
de quién espera.
Lleguan los mensajes.
III.
¿Un Yo ausente en la poética?
¿un Yo ausente del mundo?
¿un Yo incapaz de mirar, de pensar, de decir?
El presentismo es
toda la interpretación, y a su vez,
el error de la interpretación
y su rectificación.
IV.
todas las cosas parecen entrar
en el lugar en que están con la noche
en la noche.
La silla, el mate, la cortina,
-la pausa justa entre cada uno
de los objetos esperando
sus nombres-
el porro, la vida, los libros,
la ropa y el capricho.
Entran haciendo sus gracias por la ventana
aunque ya estaban,
coordinando movimientos al igual
que si de coreanos contentos se tratase.
El festejo adecuado de los lugares adecuados.
Después de todo
un punto en un planeta,
en un planeta que es un punto de una galaxia
solo cobra sentido
cuando se sabe dónde pica
en el planeta o en la galaxia.
y yo lo pienso y te pienso, repaso otra vez
la lista
y eso también tiene su lugar con la noche
en la noche
que tal vez le queda tan
cómodo como al resto
después de todo toda la noche cabe
en esta noche /porque es toda para si
y por lo tanto un yo en todo en si.
Llena, tautológicamente llena, rebosante
se ríe toda ella de todo mi
y ella solo es más porque ahora también la risa
entra en la noche.
Y así avanza
como una costa negra comiéndose
su propio record de velocidad.
La silla, el mate, la cortina,
el porro, la vida, los libros,
la ropa y el capricho.
El capricho, las calles, la ropa,
la vida, el porro.
El mate, ciudades, la ropa,
la vida, los libros.
Los libros, un disco, la vida,
la ropa, el mate,
el capricho.
la vida, el porro.
El mate, ciudades, la ropa,
la vida, los libros.
Los libros, un disco, la vida,
la ropa, el mate,
el capricho.
Y no importa
que agregues o desagregues
a la ecuación
la noche da siempre lo mismo.
Tal vez es el sentido de exactitud
lo que me jode tanto.
Y tal vez hasta lo estoy forzando.
De todas formas, era solo para decir
que es inexorable
todas las cosas parecen entrar
Tal vez es el sentido de exactitud
lo que me jode tanto.
Y tal vez hasta lo estoy forzando.
De todas formas, era solo para decir
que es inexorable
todas las cosas parecen entrar
en el lugar en que están
incluso la queja entra en el espacio
donde quisiera que aparezcas.
Vos allá,
yo en lo mio,
la noche en ambos
no suma
yo en lo mio,
la noche en ambos
no suma
nada.
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